02 diciembre 2007

Offline 3 (II parte)


Nunca me han gustado los desconocidos.
Quiero decir que sí, vale, cuando no estoy cansada me encanta charlar con los taxistas o con las abuelas del ambulatorio, pero siempre he odiado charlar con desconocidos cuando sales a tomar una copa. Cuando sabes que –sí, si eres tía te ocurre eso con mucha frecuencia- si te apetece acostarte con él, o con él o con él, vas a conseguirlo.
Es demasiado fácil para que sea divertido.
Con match conseguí superar ese recelo.
Y el otro día, con Offline3, conseguí superar uno aún mayor: conseguí acostarme con alguien –genial, inteligente, interesante- que no me resultaba apetecible.
Y estuvo bien.
Estuvo realmente bien.
Hasta que decidió que –a pesar de vivir en la calle de al lado- prefería quedarse a dormir en mi casa para poder abrazarme y besarme toda la noche.

Es increíble como a veces compartir sexo puede ser menos íntimo que compartir almohada.

1 comentario:

brujito dijo...

Yo no lo considero increible, sino todo lo contrario, es dificil dormir con alguien, compartir sexo no.