29 octubre 2007

la causa incausada


MiamigaT nunca tiene sexo con chicos porque nunca tiene condones, y no compra condones porque –total!- nunca tiene sexo con chicos...

28 octubre 2007

regalo de cumpleaños


Ayer, cumpleaños número 1 del fin de semana.
En un bar.
En la barra él. A lo lejos yo. Le miro hasta que me mira. Le miro mientras me mira. Me mira mientras le miro. Llama a alguien que está junto a mi. Es un amigo mío y por lo visto también suyo. Nuestro amigo nos presenta.

Más tarde, Elchicoquecreequetengoojosdedibujomanga me dijo que cuando me vio junto a E. pensó –genial, puedo conocerla sin quedar como un imbécil-. Cuando yo vi a E. junto a él pensé –genial, puedo conocerle sin tener que seguir haciendo el imbécil-.
Hablamos de nuestro trabajo, el mismo otra vez, de obsesiones, de música y de tribus africanas.

–Tú no habías oído nada de mi ni yo de ti, Chicadeojosdedibujomanga, en realidad somos desconocidos-

Me gusta su forma de ser diferente sin dejar de ser normal. Me gusta su cara recién levantado. Su forma de morder la piel. Su forma de alargar la sobremesa hasta el café y el café hasta casi la cena. Su te llamaré el lunes.
Pero sobretodo me gusta que una hora después de despedirnos no me haya enviado ningún mensaje.

26 octubre 2007

offline (capítulo II)


"Tenía un montón de citas pero decidí quedarme en casa y teñirme las cejas”.
Vale, yo no me he quedado en casa, he tenido mi segundo matchetazo.
He dejado a mis amigos bailando música electrónica o tomando vinos en bares para cenar con un desconocido.
Habíamos hablado en el messenger. Era ocurrente, rápido, sarcástico y gilipollas.

Cuatro cosas a las que nunca he podido resistirme. Era Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón.
Pero en realidad ni siquiera me lo ha rozado.

Y sí, este experimento está siendo divertido. Siempre me ha gustado hablar con desconocidos. Siempre me ha gustado gustar. Sólo que creo que cuando conoces a alguien de forma premeditada, el nivel de expectativa se eleva a grados incumplibles. Sólo que creo que busco en la gente lo contrario a lo que digo que estoy buscando. Busco que se parezcan a lo que conozco. Busco que se parezcan a lo que ya he tenido. Le busco a él.

24 octubre 2007

offline (capítulo I)


El domigo tuve un encuentro con Miamigoinvisible1. Un chico de aquí y de allá, tan normal como si lo hubiera conocido en el supermercado de mi barrio y tan extraordinario como si hubiera llegado hasta él desde muy lejos.
Me divirtió lo artificial de la situación: explicar las razones, escuchar las del otro. Y como en una entrevista de trabajo, hubo demasiados momentos en los que quise conseguir el puesto sin estar demasiado interesada en las condiciones.
Siempre se me han dado fatal estas cosas, porque al final siempre me acaban contratando.
Y eso fue lo que pasó. 3 mensajes y una llamada en 12 horas.

A pesar de su correctismo, a pesar de su espiritualidad, sería casi perfecto si no fuera por una cosa: le gusto yo.

21 octubre 2007

unseñordeMurcia


Y aunque me había prometido que nunca lo haría, he dejado a un amigo revolver en el cesto de los trapos sucios.
Bienvenido, tú.

18 octubre 2007

qué diría Nietzsche de todo esto?



Elchicoquecuandohablausaonomatopeyas ha vuelto a volver con su Noviaexnovia.
Supongo que eso quiere decir que no volverá a volver conmigo hasta que ella no vuelva a no volver con él.
Qué simple todo...

17 octubre 2007

la noche de los móviles vibradores


Lo reconozco, tengo el Síndrome de Diógenes de los teléfonos.
En la memoria de mi móvil hay más de 700 números almacenados. Antiguos caseros de pisos en los que viví alguna vez, médicos que nunca llegaron a visitarme, amigos de amigos que viven en ciudades que alguna vez visité, albañiles, fontaneros, chicas de la limpieza, ilustradores, exnovios de amigas, exnovias de amigos, exnovios de amigos y exnovias de amigas, antiguos compañeros de trabajo y antiguos amantes conviviendo en 12 cm2.

Ayer, MiamigaMt, MiamigaMe y yo, decidimos darle sentido a este afán por el coleccionismo. Cada una seleccionó de la agenda de otra a tres amantes más o menos recientes para enviarles desde otro teléfono mensajes comprometedores.

Y así fue como periodistas, abogados, presentadores, publicitarios y aficionados al baloncesto jugaron a las adivinanzas compitiendo en ingenio, sin saberlo, durante más de tres horas. Tres horas con cientos de mensajes, ene copas, 7 móviles, tres chicas y un denominador común “he perdido el móvil, no recuerdo quién eres”.

Desde luego, la noche más divertida que podía patrocinar una compañía telefónica.

bien


He cumplido uno de mis propósitos para el otoño antes de que acabe el otoño.

14 octubre 2007

en familia


Últimamente, al menos una vez al día me acordaba de la tribu africana. Ésa en la que los vínculos de parentesco no se establecen a través de lazos de consanguineidad sino a través del sexo. Esa tribu en la que existe un término para definir la relación que se establece entre dos personas que se están acostando con el mismo individuo. No sé, pongamos “concuñados”.

Últimamente yo estaba empezando a tener tantas “concuñadas” como amigas.

En circunstancias “normales” me habría apuntado a senderismo o recolección de nísperos, pero no me gusta el campo y sobretodo no tengo tiempo.
Por eso me apunté a match.com. Obviamente lo de la pintura era una excusa.
Simplemente necesito conocer a gente diferente. Necesito conocer a gente de la que NO he oído hablar antes.

Y he conocido a un pintor argentino que en realidad es carpintero y probablemente asesino en serie.
Y a un exdependiente de tienda de comics que me recuerda a John Cusack en Alta Fidelidad.
Y a un chico de mi sector. Que se ríe, habla y piensa de la misma manera que yo.
De la misma manera demente que yo.

Hemos intercambiado una decena de mails a través de la página, hemos hablado de las tribus africanas que utilizan términos para definir el parentesco en base a la sexualidad y no los lazos de sangre. Nos hemos reído de los tópicos de nuestro trabajo. De nuestro pasado, de nuestras vidas. Y cuando hemos pasado a intercambiar mails a través de nuestros correos personales....
“mira, chicadelaqueaquínovamosadecirelnombre, no puedo seguir hablando contigo por razones éticas. Te conozco. Indirectamente, pero te conozco. Soy el mejor amigo de Elchicoquecreaproblemasparalosdemás”.

Sí. De entre los millones de personas que aseguran tener en su base de datos los de match.com he estado a punto de convertir en concuñados a un examante psicópata/acosador compañero de mi último trabajo con su mejor amigo, ElDAqueleelostextos.

Lo que este chico de match, ElDAqueleelostextos no sabe, es que también ha estado a punto de convertirse en concuñado de otro amigo y excompañero de trabajo suyo.

13 octubre 2007

matching


He hecho algo que jamás pensé que haría.
Me he dado de alta en match.com.
Que lo haya hecho mientras esperaba a que secara la segunda mano de pintura de la entrada de mi casa supongo que sólo le añade el agravante de alevosía.
Pero ha sido divertido, y me he dado cuenta de una cosa:

La clase de personas de las que dices huir en la realidad son las personas que buscas en la virtualidad.
(Sí, he hecho acopio de torturados, irascibles, trascendentes, modernos, y compañeros de sector).

La clase de personas que dices buscar en la realidad son las personas de las que huyes en la virtualidad.
(No he devuelto un solo mail a nadie que busque pareja, que se autodenomine sensible, cariñoso o que tenga una profesión compaginable con la vida).

No. No aprendo.

afortunada


Todo el mundo tiene una lista de al menos diez MUST que nunca faltan en su depensa.
En la mía siempre hay repuesto de tallarines, tomate frito, atún, sésamo, arroz, anchoas, sacarinas y galletas chinas de la fortuna.
Hubo un tiempo en que a éstas últimas las devoraba compulsivamente hasta el punto de convertirme en el blanco de todas las ironías de mis amigos. Y aunque nunca supe si me había convertido en adicta a su sabor o a sus mensajes, sigo desayunando una todas las mañanas.

Un hábito que debería cambiar, porque ya van demasiados días que me descubro actuando para darle la razón a una galleta.

11 octubre 2007

se abre el telón


A veces la realidad te cuenta sus propios chistes.
La mía podría ser monologuista de un crucero para jubilados...

10 octubre 2007

paso


Recién llegada de una de esas fiestas de sector. Cientos de antiguos compañeros de otras empresas. De otras épocas. De cuando las cosas se hacían de otra manera. Besos sinceros o mentirosos. Sonrisas. Cráneos rapados escondiendo calvas incipientes. Vestidos anchos escondiendo curvas asentadas o bulimias evidentes. Algún canapé, muchas copas y demasiadas personas haciendo las mismas confesiones: “...el trabajo genial, pero me encantaría tener tiempo para mi vida personal...”.
¿Vida personal?, ¿para qué? siempre que la he tenido ha sido un desastre.

Y es verdad, se nos da mucho mejor comer croquetas.








MENSAJE OPORTUNO EN MI GALLETA DE LA FORTUNA
: Un amigo en el Mercado es mejor que tener dinero en la cartera.

07 octubre 2007

0,0000000000000000000000000000000000000001


No creo en dios. No creo en la reencarnación. No creo en las energías. Ni en la química, el aura, el taichi, el fengshui o el tantiem.
Pero creo en la estadística. Y en la probabilidad.
Creo en ellas con absoluta devoción. Casi con fanatismo.
Por eso, cuando mi vida se cruza con la casualidad, con la violación de la lógica y la razón, me quedo tan asombrada como si hubiera asistido en directo al milagro de los panes y los peces.
Cuando conocí a Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón viví con él la multiplicación de los panes y los peces, la resurreción de Lázaro y varias curaciones de leprosos.
Y hoy, después de encontrarnos por cuarto día consecutivo, después de calcular la probabilidad de que dos personas coincidan en el mismo espacio, a la misma hora, en una ciudad de 1942 kilómetros cuadrados y 3.205.334 habitantes, sólo puedo pensar que como vuelva a vivir con él otro milagro, otra casualidad imposible, tendré que creer que el destino está tratando de decirme algo.
O que está tratando de hacerlo él.

¿dónde están las llaves?


Si eres chica, te ha sucedido alguna vez. Si eres chico, has visto cómo pasaba. Por alguna ley misteriosa que rige las voluntades, los objetos y a las personas de este mundo, las cosas que encuentras en un bolso son todas, absolutamente todas las que NO estabas buscando.
Esto es lo que me sucede con Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón, desde que no le busco, desde que no quiero verle, me lo encuentro en todas partes.

Estábamos equivocados, el mundo no es un pañuelo.
El mundo es un bolso del H&M.

06 octubre 2007

cosas que quiero hacer para reconciliarme con el otoño


1.- Pasear por el retiro al perro de alguien.
2.- Que alguien me pasee por el retiro a mi.
3.- Llegar a diciembre sin que los kleenex me hayan levantado toda la piel de la nariz.
4.- Comprar al menos cinco números uno de coleccionables que jamás voy a terminar.
5.- Apuntarme al gimnasio, a claqué, a chino... y pasarme al menos por un par de clases.
6.- Ver llover y que no sea desde la calle.
7.- Ver llover desde la calle con un paraguas que no sea de tres euros.
8.- Comprar un paraguas de más de tres euros.
9.- Empezar una bufanda.
10.- Comprar una bufanda.
11.- Comer castañas, boniatos y demás alimentos callejeros asquerosos e hipercalóricos sólo porque es muy cinematográfico.
12.- Ponerme sombrero y que no sea para una fiesta de disfraces.
13.- Revolver durante horas los puestos de algún mercado callejero –a ser posible de libros usados- para comprar algo viejo y caro que podría haber encontrado en cualquier sitio barato y nuevo.
14.- Comprarme prendas imposibles de llevar en cualquier otra época del año. Jerseys de manga corta, cazadoras de entretiempo, chubasqueros...
15.- Beber café en taza grande mirando melancólicamente por la ventana sólo porque es muy cinematográfico.
16.- Comprarme botas de agua.
17.- Ponerme las botas de agua.
18.- Preparar pasteles y compartirlos.
19.- Poner burletes en las ventanas antes de que llegue el verano.
20.- Escuchar a Belle & Sebastian, Serrat o cualquier tipo de música cuyo único objetivo sea hacer llorar.
21.- Ir al campo. Comer carne semicruda en un restaurante pintoresco. Volver.
22.- No contar cuántos días quedan para que llegue el invierno.

05 octubre 2007

aprendiendo


Ya sé contar hasta diez sin usar los dedos.

Hoy, ella, él y yo hemos vuelto a coincidir.
Y esta vez me ha dolido (un poquito) menos.

04 octubre 2007

vale, lo sé...


la vida sigue.
Pero a mi me ha pillado con mocos en la nariz y poco oxígeno en el cerebro.

02 octubre 2007

Y sí...


Ayer coincidimos en la misma dimensión espacio/tiempo MiamigaM, Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón y yo.
Y duele. Joder si duele...

frivolidades


Misantopadre, anoche: “...tu hermano está metido en gastos con todas esas cosas que no existían hace diez años. Vamos, totalmente innecesarias”.