30 septiembre 2007

Amistad dos puntos


Amiga1–al teléfono con Amiga2-: “...kjhkjh...koiuoiuoijlkjl...jhgjhg... oye, me están entrando muchas ganas de cagar, te llamo ahora...”
Amiga2: “...¿Por qué, no tienes teléfono portátil?...”

Real como la vida misma.

regalos bizarros 1


MiamigaT me ha regalado uno de esos horribles relojes/anillo.
-...como te gustan los relojes...-
Ahora llevo dos, el de compromiso y el de muñeca, así que nunca sé qué hora es.

29 septiembre 2007

estos momentitos...



MiamigaT cuida al hijo de su ex todos los miércoles. Luego el padre lo recoge y casi siempre cenan los tres y duermen juntos.
Al exnovio de MiamigoG, su antigua suegra lo invita todos los domingos a las comidas familiares. Y él, para horror de las actuales parejas de MiamigoG, nunca falta a su cita.
MiamigaMt ha tenido más sexo con su novio cuando ha dejado de serlo, que en todos los años que pasaron juntos antes.
A MiamigaMr le encanta oir a su ex presentándola como la futura madre de sus hijos.
MiamigaM, además de dormir con sus gatos, con sus exrollos y conmigo, a veces lo hace también con su ex, eldesorientado. Pero a él dice que le quiere de verdad.
Elargentinoquefingequenoloes sigue flasheado por su ex cuando no lo tienen flasheado otras.
Y yo, que escucho y vivo las historias de todos, sigo celebrando con Elmusicoquenuncaescuchalasletrasdelascanciones nuestro aniversario. Aunque ha pasado más de un año desde que dejamos de vivir juntos.
Por eso, cuando Elchicoquecuandohablausaonomatopeyas me dijo el otro día que tenía ganas de verme pero prefería esperar un poco más porque pasaba por un momento raro con su ex, tuve claro que todo lo que pasa a mi alrededor había que contarlo.
Había que cantarlo.
Y aquí están, sin disco, sin temas, sin buenas voces, sin músicos ni música:
Días raros con mi ex”.
Una banda que mola, aunque está claro que no rompe con nada.

Qué quieres conseguir?


Cuando era tan pequeña como para compartir habitación, a veces, como todos los niños inventaba enfermedades para no ir a la escuela.
-me duele aquí-
Y a los diez minutos, invariablemente, me acababa doliendo.

Hacía semanas que me dolían MiamigaM y Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón cuando ella pasó con Elmuyaidín exactamente por la misma situación, por las mismas circunstancias, que yo estaba viviendo.
Por las mismas circunstancias que ellos, MiamigaM y Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón habían propiciado.
Y yo, la niña que se aterrorizaba cuando -después de inventarse una enfermedad- se daba cuenta de que le había subido la fiebre, después de desearles a cada minuto unos días como los que estaba pasando, la abracé, la acompañé y la consolé.
Dormí con ella en la cama en la que ahora, a veces, se acuestan juntos.
Me quité el disfraz de Angela Channing que siempre me ha quedado demasiado grande y me desperté ligera, pero con el peso de ser Uri Geller en la cabeza.
Con la sensación de estar libre de toda culpa. De toda responsabilidad sobre mis fracasos. Pero no sobre los suyos.
No puedo luchar contra el pasado de nadie. No puedo borrarlo. No puedo eclipsar en dos meses a alguien que ha importado durante años.

Como mucho, si me concentro, consigo doblar cucharillas.

26 septiembre 2007

autolesiones y guilty pleasures



1.- Mar el poder del Mar, de Facto de la Fé.
(...esto no se para, esto nos separa...)
2.- Often, de The Sunday Drivers.(...have you forgotten the way you looked at me when we met?...)
3.- A cualquier otra parte, de Dorian.(...ya no recuerdo el momento en que te dije por última vez que el cielo se estaba abriendo...)
4.-Bizarre love triangle, de New Order.(...I don't think you're what you seem...)
5.- Heartbeats, de The knife.(...sharing different heartbeats in one night...)
6.- Ego & I, de My Diet Pill.(...If one feeling can hurt a woman, she wanna be inhuman. Is there anyone who can help her ? She doesn’t want to suffer...)
7.- On My Balcony, de Flunk.(...all I wanna do is sit here on my balcony thinking about you and me and how happy we could be...)
8.- Electricity, de OMD.(...electricity, electricity, electricity, electricity, electricity...)
9.- Pate Filo, de Malajube.(...j'ai couvert mon coeur d'une pâte filo qui me protège de toi et de ta libido...)
10.- Death To Birth, de Pagoda.(...Ohh Ohh Ohhhhh...)
11.- The Blower's Daughter, de Damien Rice.(...just like you said it should be...)

bang!


Cuando no tienes opciones, cuando no tienes recursos para defenderte de lo que te ataca, de lo que te duele, te aferras a cualquier arma que pueda hacer daño.
La mía es la amabilidad. El cariño. La simpatía. La garantía de que no hay nada que hiera más que hacer daño a los que te quieren.
Sólo espero que en ningún momento me acabe explotando en las manos.

21 septiembre 2007

Su turno


La semana pasada lloré en la frutería del champion. Como una Juliaroberts cualquiera. Como alguien que escucha a Luzcasal. Como una mujeralbordedeunataquedenervios. Como una chica Almodóvar de pendientes de plástico de los que te regalaban en las bolsas de patatas de los 80.
Estaba comprando tomates y simplemente pasó. Hasta ese momento estaba sólo cabreada.
Cabreada con MiamigaM, cabreada con Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón, pero sobretodo, cabreada conmigo. Cabreada por mi habilidad para golpearme una y otra vez contra el mismo muro.
En ese instante, Elmúsicoquenuncaescuchalasletrasdelascanciones, llegó para sonreirme. Y le recordé. Mismo lugar. Misma luz, un año y medio atrás, cuando las cosas eran previsibles. Cuando en la cesta de la compra había jamón y queso para los sandwiches mixtos del sábado por la noche. Cuando los yogures no eran todos desnatados. Cuando no sabía lo que eran los platos precocinados. Cuando la leche se acababa en dos días. Cuando había galletas para el desayuno y nueces para la cena. Cuando las cuchillas de afeitar no eran de color rosa y el gel no tenía crema hidratante.

Y mientras él llenaba las bolsas y yo pagaba en la caja me sentí como recién salida de una pesadilla. Como si todo este tiempo, todas estas cosas no hubieran pasado jamás. Convencida de que una vez fuera del supermercado, andaríamos hasta el número 41 de nuestra calle y nos quedaríamos ahí.

Y salimos del champion. Llegamos al número 41, nos despedimos con un beso y yo subí sola hasta el 25.
Hasta mi casa.

16 septiembre 2007

Ayer


Ayer, MiamigaM, Laactrizdebollywood, laquecompraropadeshowrooomquelesaleextremadamentecara, apretó el botón de retorno rápido de la correa extensible y en un momento, y con sólo un gesto, perdí a Elchicoquevaadestrozarmeelcorazón y la perdí a ella.
Y hoy, yo tengo un nudo en la garganta, y ellos una vez más y como siempre, tienen lo que se merecen: se tienen el uno al otro.

15 septiembre 2007

tachán...!








Y elchicoquecuandohablausaonomatopeyas, que tiene en la piel el dibujo del edredón de mi cama, mi pared y mi toalla del baño, ha vuelto para mimetizarse con el entorno.

13 septiembre 2007

palabras


Supe que había dejado de quererme cuando en sus mensajes, empezó a mandarme BSS en lugar de un beso.

09 septiembre 2007

contar, medir o pesar


Érase una vez un país en el que todo, todo lo que pasaba se podía contar, medir o pesar.
Por eso, cada vez que una chica le preguntaba a su chico: -"¿cuánto me quieres?"-.
Él podía contestar: -“Mi amor por ti es tan grande como un estadio de fútbol”-.
Y ella lo entendía perfectamente y se daba por satisfecha.
Pero un día llegó un tipo, puso de moda el fútbol 7, construyó otro estadio y empezaron los problemas.

05 septiembre 2007

Nada es lo que parece.


No conoces a alguien por la música que dice que escucha sino por la lista de reproducciones recientes de su itunes. No conoces a alguien hasta que no le ves hacer y deshacer una maleta. Hasta que no ves su cepillo de dientes y su neceser de viaje –¿Qué diez cosas te llevarías a una isla desierta, a una ciudad superpoblada, a un desierto donde rodaron star wars?- No conoces a alguien hasta que no eres capaz de reconocer el olor de su desodorante además del de su colonia. No conoces a alguien por despertar a su lado después de haber follado, conoces a alguien cuando despiertas a su lado sin haberlo hecho. No conoces a alguien hasta que no le ves desayunar en un bar de carretera. No conoces a alguien hasta que, además de algunas noches de cine, no compartes el mando a distancia de la tele.
Y si en ese momento, si en ese preciso momento sigues recordando las cenas de sushi, los desayunos postcoito, los atardeceres en terrazas o el olor de su colonia es que eres absolutamente gilipollas.